ENTREVISTAS

Fernando de Pablo: “Madrid sigue prosperando y la tecnología nos ayudará a construir una ciudad más equilibrada y justa”



Dirección copiada

Fernando de Pablo, Director General de Madrid Digital en el Ayuntamiento de Madrid, detalla cómo la estrategia Madrid Capital Digital está posicionando a la capital como referente en innovación tecnológica urbana. Habla sobre ciberseguridad, IA, automatización y congresos internacionales como el reciente GovTech 4 Impact World Congress

Publicado el 29 may 2025

Rufino Contreras

Redactor Jefe



Fernando de Pablo

¿Qué es GovTech 4 Impact y qué objetivos persigue?

GovTech 4 Impact es un congreso que nació hace dos años para cubrir una necesidad global: crear un espacio de encuentro en torno a los programas GovTech y la transformación digital. Se organiza junto a Kenes Group y Gobe, y reúne a especialistas de organismos internacionales, empresas privadas, universidades y gobiernos para compartir retos, planteamientos y necesidades comunes. En estos dos congresos han participado más de 250 ponentes de 30 países distintos y todas las grandes instituciones internacionales, y ha tenido un amplio seguimiento, especialmente internacional. Además del propio congreso, hay iniciativas paralelas como grupos de trabajo, asociaciones empresariales o clústeres tecnológicos. Ha habido reuniones, como side events, de la iniciativa de ONU Digital Public Infraestructures (DPI), del programa europeo GovTech4All, de la Unión de Ciudades Capitales de Iberoamérica (UCCI), el Foro 5G, etc. Esta visión multidisciplinar y la colaboración público-privada con todas las áreas de ayuntamiento es fundamental con un objetivo claro: que los beneficios de la tecnología lleguen a las personas.

¿Cómo se enmarca esta iniciativa dentro de la estrategia digital del Ayuntamiento de Madrid?

Se enmarca dentro de Madrid Capital Digital, nuestra estrategia de transformación digital. Esta estrategia tiene varias áreas de trabajo:

Primero, creando estructuras administrativas y la gobernanza necesaria para que la transformación sea real, no solo tecnológica. La transformación digital es primero un reto organizativo y de cambio cultural. También desarrollamos estrategias tecnológicas (IA, datos, 5G, ciberseguridad, automatización, Apps, etc.) y de ciudad, en colaboración con empresas y otras administraciones nacionales e internacionales porque son esenciales en este proceso. Y por supuesto impulso digital, tanto en infraestructuras como en servicios y transformación digital de áreas, que llegue a todos.

Y por supuesto, en cooperación y posicionamiento de Madrid en el mundo. Madrid actúa también como ciudad que: participamos en congresos internacionales como el de Smart City en Seúl o Barcelona (donde hemos tenido algunos reconocimientos a esta estrategia). Con Barcelona hemos firmado un acuerdo de cooperación, porque las ciudades competimos y cooperamos al mismo tiempo. Queremos que Madrid sea una ciudad de referencia para acoger este tipo de eventos, porque está considerada como la mejor ciudad para eventos según los estudios especializados internacionales.

¿Cuál es el objetivo de la estrategia Madrid Capital Digital?

Queremos hacer de Madrid una ciudad mejor: más eficiente, sostenible, con mejor atención a las personas vulnerables. Y creemos que la transformación digital es el camino, considerando la tecnología como un medio, no un fin.

La estrategia tiene tres ejes principales:

  1. Servicios públicos digitales: Madrid ha avanzado enormemente en los últimos años en la digitalización interna y externa. Estamos orgullosos de ocupar el primer puesto en el informe de la ONU en este ámbito, pero lo que realmente nos ocupa es el impacto real en las personas, que llega con el uso. Disponemos de un observatorio de administración digital publicado en internet, donde todo el mundo puede consultar la evolución de los servicios. Además, liberamos personas para dedicarlos a quien más lo necesita porque la relación electrónica les supone una barrera, como los mayores, por ejemplo.
  2. Inteligencia de ciudad: Se basa en el uso de datos para una gestión más eficiente, incluyendo ciberseguridad, gemelos digitales, simulaciones urbanas e inteligencia artificial. Necesitamos datos para conocer lo que está ocurriendo en la ciudad en tiempo real, tomar decisiones y planificar el futuro de los servicios e infraestructuras. Datos de calidad, completos, etc
  3. Madrid como polo de atracción digital: Queremos que Madrid sea un gran hub de infraestructuras digitales en Europa, una ciudad que atraiga infraestructuras de computación (se ha visto la inversión en centros de datos en los últimos años), empresas tecnológicas, 5G, ciberseguridad, logística y, sobre todo, talento tecnológico. Apostamos por la colaboración público-privada, creando un marco adecuado para que las empresas se instalen y trabajen en Madrid.

Para implantar los proyectos (el papel lo aguanta todo, pero a nosotros nos importa la puesta en marcha real) hemos creado un Centro de Transformación Digital, que persigue e impulsa los proyectos de la estrategia.

¿Con qué presupuesto se sostiene esta estrategia?

Casi todo el presupuesto es municipal. Los fondos europeos, en esta área concreta, no han llegado en gran medida a los ayuntamientos; han sido canalizados mayoritariamente a la administración central y comunidades autónomas o directamente a algunas áreas (como movilidad o servicios sociales). No es una crítica es una realidad.

Fernando de Pablo

Queremos hacer de Madrid una ciudad mejor: más eficiente, sostenible, con mejor atención a las personas vulnerables

FERNANDO DE PABLO

Dividiría el presupuesto en dos niveles: uno, el gestionado directamente por el área de tecnología e informática del Ayuntamiento, que se ha duplicado; y otro, el que está distribuido en todas las áreas municipales. Porque presupuesto tecnológico hay en las empresas de gestión de residuos, mantenimiento semafórico, alumbrado y en todos los contratos municipales.

Con ese contexto integral, la estrategia Madrid Capital Digital contempla 1.000 millones de euros en 5 años, que incluye tanto todo el presupuesto inversiones directas y operación como de las empresas municipales. Puede parecer mucho, pero con un presupuesto total de Madrid de 6.000 millones de euros parece una cantidad razonable.

¿Qué tecnologías están marcando la diferencia?

Analizamos todas las tecnologías no como objetivo, sino como instrumentos para ser más eficientes y proporcionar mejore servicios a los ciudadanos, de la automatización a los gemelos digitales y la IA. Pero lo importante es la calidad del servicio final, al ciudadano no le interesa la tecnología que hay detrás.

Estamos apostando fuerte por la automatización, sobre todo con RPA incluso con IA, para reducir tiempos de tramitación (lo que más valoran los ciudadanos) y mejorar la eficiencia interna.

Además, hemos adoptado una estrategia Madrid Multicloud: hace seis años toda la informática era interna; hoy no tenemos centros de datos propios. Todo está externalizado, con garantías y con fuerte inversión en ciberseguridad.

Hemos creado un centro de ciberseguridad (CCMAD) con una unidad específica dedicada a la Smart City y el IoT. Con el despliegue de 5G, cada dispositivo conectado en la calle puede ser un punto de ataque, así que hay que estar preparados, creemos que es un riesgo muy importante de presente, pero más de futuro.

Para reforzar la interoperabilidad y la ciberseguridad de todos los dispositivos que se instalan en la ciudad hemos creado un Laboratorio IoT con la UPM donde están presentes todas las empresas y de, forma relacionada, un Foro 5G para impulsar proyectos nacionales y de programas europeos en colaboración con otras ciudades

También apostamos por la inteligencia artificial con sentido común y gobernanza. Creamos hace un año y medio MAIA, un grupo de trabajo con tres ejes: gobernanza (desde la oficina digital), desarrollo tecnológico (IAM) e impulso empresarial (área de innovación).

Y por supuesto, hemos migrado todos los servicios municipales al móvil: tenemos más de 760.000 usuarios activos en 4 años. Todos estos datos están disponibles en línea.

Mucho hecho, pero es mucho más lo que nos queda por hacer y mejorar

Hoy es imposible hablar de transformación sin mencionar la inteligencia artificial. Todo el mundo está en ello. ¿Cuál es vuestra aproximación a la IA generativa?

La inteligencia artificial no es nueva para el ayuntamiento. Llevamos muchos años utilizándola en diferentes procesos, como en gestión de datos o información, TLN, tratamiento de imágenes en movilidad y Geoportal, etc. Pero cuando aparece la IA generativa (se “democratiza”” para el gran público), creamos un grupo de trabajo específico para explorar sus posibilidades y contener los riesgos. Hoy en día, estamos desarrollando entre 25 y 30 soluciones distintas con IA generativa: agentes y asistentes virtuales, automatización de procesos, mejora de productividad documental… Todo, eso sí, bajo un marco claro de gobernanza.

Tenemos, por ejemplo, un ChatGPT de Turismo o un asistente virtual para detectar la soledad no deseada, PALOMA. Pero siempre con un principio: generar confianza ciudadana. Y para lograrla, la clave es la transparencia y el control interno.

Ya se habla del «año de los agentes inteligentes». ¿Estáis trabajando en esa línea?

Sí, estamos comenzando el desarrollo de agentes, con decisión, pero también con prudencia. Estamos en la adolescencia de la IA y los cambios tecnológicos son constantes, y es importante el momento preciso en que se invierte en tecnologías emergentes (ni antes ni después). Pero ya estos agentes pueden, por ejemplo, precumplimentar formularios automáticamente, incluso con imágenes, lo cual tiene un gran potencial. En los próximos años pensamos que habrá multitud de agentes especializados y será necesaria una orquestación y gobernanza específica de los mismos, incluyendo el control del acceso a los datos corporativos, algo a tener en cuenta, en todo su ciclo de vida. Pero honestamente creo que estamos en una fase inicial aún, explorando oportunidades y riesgos. Como se dice ahora hay que pasar del POC al ROI

¿Cómo gestionáis los datos? ¿Qué estructura tenéis en el Ayuntamiento para ello?

Creamos una subdirección específica de datos e inteligencia artificial dentro de la Oficina Digital, para trabajar en la gobernanza del dato. La gestión del dato en una administración grande como Madrid es lógicamente, compleja, con silos y problemas de interoperabilidad. Lo normal en grandes organizaciones. Pero, siendo conscientes de que es un trabajo continuo y de medio plazo, es absolutamente esencial. Nos apoyamos en una estrategia transversal basada en la calidad y la interoperabilidad, con complicidad con todas las áreas a través de los delegados digitales.

Madrid toma decisiones basadas en datos en todos los ámbitos como movilidad, residuos, tráfico, agua o contaminación. Pero el dato tiene que ser de calidad. Hemos construido un data lake que nos permite esa transversalidad. Y todo esto nos prepara para iniciativas como el gemelo digital de la ciudad, el cerebro digital o la IA, que sin buenos datos de calidad y tiempo real, no sería posible. Otro escenario de trabajo permanente, como muchos en la gobernanza tecnológica.

¿Podrías darnos algún ejemplo concreto del impacto de esa estrategia de datos?

Un caso claro de gestión de datos es la transformación digital de la Agencia Tributaria de Madrid. Uno de esos proyectos que muchos equipos no se atreven a acometer por su extrema complejidad. Madrid lo ha acometido y se han reducido de 15 millones a 5 millones los registros base, tras una depuración profunda. ¿El resultado? El año 2024 fue el de mayor recaudación en período voluntario, y también el de mayor ejecución presupuestaria interna y menor tiempo de pago a proveedores. Todo gracias a un trabajo silencioso, pero clave, sobre el dato.

También la gestión de los datos en tiempo real en movilidad, por ejemplo, en el control de acceso a las zonas de bajas emisiones, ha permitido a Madrid de ser una ciudad incumplidora históricamente a cumplir todos los límites de requisitos de calidad europea, con el mejor índice de calidad del aire de su historia.

La interoperabilidad sigue siendo un reto en España. ¿Cómo lo veis vosotros?

España es muy fuerte en interoperabilidad en Europa porque lo exige nuestro modelo descentralizado de país. Madrid ha sido pionera en poner interoperable, por ejemplo, el certificado de empadronamiento en la Plataforma de Intermediación. No solo los ciudadanos se descargan más de un millón al año de forma inmediata al móvil, en un minuto, sino que otras administraciones pueden consultarlo sin que el ciudadano tenga que pedirlo, sólo autorizarlo.

España tiene una plataforma muy avanzada de interoperabilidad. Lo que falta, en mi opinión, es a veces el conocimiento y voluntad organizativa. En Madrid, nuestra política es clara: no pedir nada al ciudadano que podamos obtener por medios interoperables. Que la aplicación del principio “once only” sea una realidad práctica y no un objetivo. Creo que vamos en la buena dirección.

¿Ha perdido fuerza el concepto de Smart City? Hace unos años era omnipresente y ahora parece más difuso. ¿Estás de acuerdo?

Hubo una etapa de «hype» donde se prometían soluciones basadas en multitud de sensores y cajas negras con soluciones mágicas. Pero las Smart Cities no son eso y se han redefinido con una clave: usar la tecnología para mejorar la vida de las personas. Se parte de los problemas cotidianos y se le da una solución con tecnología (por supuesto con muchos sensores y datos).

El concepto sigue vigente, pero ahora lo centramos en las necesidades reales. Cada persona tiene una visión distinta de lo que es una ciudad inteligente (un niño, un mayor, un autónomo, un estudiante, un turista, …). Por eso la tecnología debe permitir una gestión flexible. Creo que hay que evitarla venta de soluciones simples a problemas complejos: nada es fácil ni rápido. Con la IA pasará lo mismo: no va a resolver todos los problemas mágicamente. Es una herramienta potente, pero, en mi opinión, no será la solución mágica a todo en el corto plazo, por ejemplo, a la ejecución de procesos de negocio.

¿Qué proyectos estratégicos destacarías ahora mismo en el Ayuntamiento?

Ahora estamos trabajando en una serie de proyectos transversales a todas las áreas, complejos de ejecución y de medio plazo, pero vitales para Madrid y el servicio público. Uno clave es la gestión inteligente de procesos: un tramitador horizontal (apoyado en reingeniería de procesos, actuación administrativa automatizada, automatización de decisiones e IA) para toda la ciudad que reduzca los tiempos de tramitación un 50%. Es un proyecto fundamental para Madrid y por eso es una prioridad para nosotros.

También destacaría el cerebro digital: un centro integral de seguimiento de la ciudad con integración interoperable de todos los centros de control de la ciudad, algo que tras el apagón energético es mucho más fácil de comprender su necesidad. Y el metagemelo digital, una plataforma flexible, interoperable, abierta, neutra donde se conectan distintos gemelos digitales que resuelven problemas concretos. Repito que todos son complejos y de medio plazo, pero diferenciales

Además, hemos creado un laboratorio de IoT con la Universidad Politécnica para garantizar que los dispositivos en la ciudad sean interoperables y ciberseguros y un Foro 5G para impulsar las infraestructuras y los proyectos en la ciudad. El crecimiento del IoT urbano es imparable y hay que estar preparados.

Y, por último, un foco muy especial en las áreas, como los servicios sociales. Estamos digitalizando todo el sistema, con soluciones para mayores reconocidas por la OCDE como buenas prácticas (Madrid te acompaña, voluntarios digitales). La tecnología, para nosotros, gira en torno a las personas. Especialmente las más vulnerables, no es un posicionamiento demagógico para quedar bien sino una forma de entender la vida y el trabajo.

Y para terminar… ¿cómo ves Madrid en 5 o 10 años? Está claro que la ciudad está en un momento especial…

Madrid está de moda, no hay duda, compite globalmente. En turismo, inversión, imagen, atracción de talento… Pero eso hay que saber gestionarlo adecuadamente. Atrae crecimiento económico, pero también retos como la vivienda, la gestión de residuos, o el mantenimiento del estilo de vida local. Por eso los grandes proyectos de Madrid son precisamente la vivienda o la liberación de zonas de tráfico en zonas verdes, continuando el modelo de los túneles de M30 y Madrid Rio.

Madrid tiene una estrategia sólida para seguir prosperando y para que la tecnología sirva como medio –no como fin– para construir una ciudad mejor, más equilibrada, más justa. Porque, al final, la calidad democrática de una ciudad se mide por cómo trata a los más vulnerables. Y en eso estamos centrados.

Yo veo Madrid fundamentalmente como una ciudad amable para vivir, con servicios públicos simples que resuelven sus necesidades más elementales de forma rápida cómoda y eficiente, Con tecnología por supuesto. Parece fácil de definir, pero nada fácil de aterrizar en una mega urbe mundial. Los responsables debemos ser arquitectos de esta ciudad que queremos en el futuro y no sólo gestores tecnológicos… Aún nos queda mucho trabajo por delante.

Artículos relacionados

Artículo 1 de 5